[138]
El Presidente Roosevelt dio un ejemplo de egoísmo diciendo, en la Conferencia de prensa de Warm Springs que no estaba prevista ninguna revisión ni aumento de las quotas de inmigración a los Estados Unidos (413).
En Evian ninguno se preocupó más que de tomar a su cargo a los perseguidos, ni siquiera de preocuparse seriamente por su suerte (414).
En marzo de 1943, Goebbels, podía aun ironizar:
¿Cuál será la solución de la cuestión judía? ¿Se creará un día un Estado Judío en un territorio cualquiera? Lo sabremos más adelante. Pero es curioso constatar que los países cuya opinión pública se decanta a favor de los judíos rehusan siempre el acogerles (415).
Tras la derrota de Polonia, se intentó otra solución provisional de la cuestión judía: el 21 de septiembre, Heydrich, haciendo alusión al objetivo final (Endziel) ordenó a los Jefes de Seguridad crear, en la nueva frontera de la URSS, una especia de reserva judía (416).
La derrota de Francia abrió a los nazis nuevas perspectivas. Podrían utilizar el imperio colonial francés, y de este modo desde el armisticio de junio de 1940 se lanzó la idea de una expulsión de todos los judíos a Madagascar.
A partir del mes de mayo de 1940, Himmler, en una nota denominada: Algunas reflexiones sobre el tratamiento de las personas extranjeras en el Este escribe: Espero que la noción de judío quede definitivamente borrada mediante la evacuación de todos los judíos hacia Africa o hacia una colonia (417).
El 24 de junio de 1940 Heydrich escribía al Ministro de Asuntos Exteriores, Ribbentrop, en el que le dejaba entrever una solución final territorial (eine territoriale Endlösung) del problema judío (418).
Desde entonces se elaboró técnicamente el proyecto de Madagascar: el 3 de julio de 1940, Franz Rademacher, responsable de los Asuntos Judíos en el Ministerio de Asuntos Exteriores, elaboró un informe diciendo:
La inminente victoria proporciona a Alemania la posibilidad y, desde mi punto de vista, el deber igualmente, de resolver la cuestión judía en Europa. La solución deseable es: Todos los judíos fuera de Europa (Alle Juden aus Europa).
El Referat D III propone como solución de la cuestión judía: en el tratado de paz, Francia debe dejar la Isla de Madagascar disponible para solucionar la cuestión judía y debe transferir e indemnizar a los 25.000 franceses que allí residen. La Isla pasará a estar bajo mandato alemán (419).
El 25 de julio de 1940, Hans Frank, Gobernador de Polonia, confirmó que el Führer estaba de acuerdo con esta evacuación pero que los transportes por mar de esta envergadura no eran realizables mientras la marina británica tuviese las llaves del mar (420).
Era necesario encontrar una solución provisional de alojamiento.
Así se dice en el atestado:
Fue el Reichsführer de las SS y Jefe de la Policia alemana, quien sería el responsable
[139]
del conjunto de medidas necesarias para la solución final (Endlösung der Judensfrage) sin tener en cuenta los límites geográficos (421).
La cuestión judía se colocaba desde entonces en la Escala de Europa, ocupada por los nazis.
El proyecto de Madagascar quedó provisionalmente aplazado, la guerra contra la Unión Soviética nos ha permitido disponer de nuevos territorios para la solución final (für die Endlösung). En consecuencia el Führer ha decidido expulsar a los judíos no a Madagascar sino hacia el Este (422).
El Führer había declarado el 2 de enero de 1942: El judío debe abandonar Europa. Lo mejor es que ellos se vayan a Rusia (423).
Con el repliegue de los Ejércitos alemanes bajo la presión del Ejército soviético, la solución de la cuestión judía reclamó un despiadado rigor (424).
En mayo de 1944, Hitler ordenó utilizar a 200.000 judíos vigilados por 10.000 guardianes de las SS para trabajar en las fábricas de armamento o en los campos de concentración en condiciones tan horribles que las epidemias de tifus hicieron decenas de miles de víctimas, exigiendo la multiplicación de los hornos crematorios.
Después, los deportados, fueron enviados por caminos que ellos mismos debían construir en condiciones de agotamiento y de hambre de tal suerte que la mayoría de ellos, por docenas de miles, sucumbieron.
Así fue el martirio de los deportados judíos y eslavos y la ferocidad de los amos hitlerianos tratándoles como esclavos a quienes no tenían la validez humana de trabajadores útiles.
Estos crímenes no pueden ser subestimados, como tampoco los sufrimientos inefables de las víctimas. Es por lo que no es en absoluto necesario añadir a este horrible cuadro los fulgores de incendios tomados del Infierno de Dante, ni tampoco aportar la caución teológica y sacral del Holocausto, para darse cuenta de esta inhumanidad.
La Historia menos enfática es, por sí misma, más acusadora que el mito.
Y sobre todo no reduce la magnitud de un verdadero crimen contra la humanidad, que costó 50 millones de muertos, a la simple dimensión de un progrom con respecto a una sola categoría de víctimas inocentes, mientras que millones morían con las armas en la mano para hacer frente a esta barbarie.
Este balance histórico, digámoslo una vez más, es aún provisional. Como para toda Historia crítica y como toda ciencia, es revisable y será revisado en función del descubrimiento de nuevos elementos: toneladas de archivos alemanes fueron incautados y transportados a los Estados Unidos: todavía no han podido ser completamente examinados. Otros archivos, se encuentran en Rusia, cuyo acceso a los mismos ha estado prohibido durante mucho tiempo a los investigadores, y ahora se han comenzado a abrir.
[140]
Un gran trabajo queda por hacer con la condición de que no se confunda el mito con la Historia, y de no pretender sacar las conclusiones antes de la investigación, como un cierto terrorismo intelectual ha pretendido imponer hasta el momento presente: la canonización de los textos de Nuremberg se ha revelado muy frágil.
La Historia, aún más que las ciencias, no puede partir de un a priori intocable.
Nuremberg había proclamado cifras de las que las más importantes se han revelado falsas: los 4 millones de muertos de Auschwitz han sido reducidos a algo más de un millón, e incluso las autoridades han debido aceptar esta revisión y cambiar las placas conmemorativas del crimen.
El dogma de los 6 millones, que ya había sido puesto en tela de juicio por los defensores más intransigentes del genocidio como Reitlinger, que apuntaba en su libro: La Solution finale, a 4 millones y medio, ha sido desechado por toda la comunidad científica, aunque pueda quedar un tema de propaganda mediática con respecto a la opinión y a los escolares.
No se trata, mostrando la vanidad de estos a priori aritméticos, de entregarse a una verificación contable que sería macabra. Se trata de demostrar más bien que la voluntad deliberada de perpetuar una mentira conduce a una falsificación sistemática y arbitraria de la Historia.
Fue preciso, para hacer el martirio real de los judíos, bajo el pretexto de no banalizarlo, no sólo pasar a un segundo plano a todos los demás, tales como la muerte de los 17 millones de ciudadanos soviéticos y de los 9 millones de Alemanes, sino incluso conferir a estos sufrimientos reales un carácter sacral (bajo el nombre de Holocausto) que era rehusado por todos los demás.
Ha sido necesario, para alcanzar este objetivo, violar todas las reglas elementales de justicia y del establecimiento de la verdad.
Era imprescindible, por ejemplo, que la solución final significara exterminio, genocidio, mientras que no existe ningún documento que permita esta interpretación, tratándose siempre de la expulsión de todos los judíos de Europa, al Este en una primera fase y posteriormente a una reserva africana cualquiera. Lo que ya es suficientemente monstruoso.
Fue necesario, para ello, falsificar todos los documentos: traducir traslado por exterminio. Este método interpretativo permite hacer cualquier cosa a cualquier texto. Lo que fue una horrible matanza llegaría a ser genocidio.
Para no citar más que un ejemplo de esta manipulación tendenciosa de los textos: en su libro sobre Les Crématoires d'Auschwitz (1993), Jean-Claude Pressac está de tal manera preocupado en añadir horrores suplementarios a esta horrorosa mortandad que cada vez que encuentra la palabra alemana Leichenkeller (depósito de cadáveres), es decir morgue, él la traduce como cámara de gas (425) allí introduce aun la noción del lenguaje codificado diciendo que el verdugo (de nombre Messing) no tuvo el arrojo de escribir que el depósito de cadáveres era un túnel para gaseamientos (426).
[141]
Ahora bien, la hipótesis del lenguaje codificado, utilizada constantemente para hacer decir a los textos lo que hubiera gustado que dijeran, no tiene ningún fundamento, en primer lugar porque Hitler y sus cómplices, como lo hemos demostrado (427) no han tratado nunca disimular los demás crímenes y los han proclamado cínicamente en lenguaje claro, además de que los ingleses habían llegado muy lejos en las técnicas y las maquinarias para descifrar los códigos y poner en claro los mensajes, que tendrían que haber sido numerosos para realizar una empresa técnica tan gigantesca como el exterminio industrial de millones de hombres.
El rechazo sistemático de tomar en consideración que la expresión que se utiliza a menudo en los textos hitlerianos de solución final territorial es igualmente revelador de esta voluntad de rehusar todo análisis que no justifique las conclusiones a priori: los 6 millones y el genocidio.
Fue preciso, con la misma arbitrariedad, incluso cuando fue comprobado que a pesar de un número considerable de declaraciones de testigos oculares sobre la existencia de las cámaras de gas, éstas jamás existieron en territorio alemán, continuando en mantener por incuestionables los testimonios idénticos sobre su existencia en los campos del Este.
Finalmente, el rechazo a discutir de una manera a la vez científica y pública los peritajes técnicos y, por el contrario, no responder más que con la represión y el silencio, no pueden más que sustentar la duda.
No existe más eficaz requisitoria contra el hitlerismo que el restablecimiento de la verdad histórica. Es a esto a lo que, con este texto, hemos querido contribuir.
[143]
Transcribimos a continuación una entrevista hecha al profesor Moshé Zimmerman, Director del Departamento de Estudios Germánicos en la Universidad Hebrea de Jerusalén y publicada en el diario Yerushalayin el día 28 de abril de 1995. Entrevista que como veremos más adelante causó una agria polémica.
El profesor Zimmerman, dice el periodista en su presentación, es especialista en Alemania, los judíos alemanes, el Tercer Reich y el Holocausto. Sus análisis históricos y las conclusiones a las que llega... Io han colocado, en el curso de los últimos años en el centro de numerosas controversias públicas... Los paralelismos que establece entre el pasado y el presente son difíciles de digerir. Por ejemplo cuando compara a los soldados judíos voluntarios para servir en los territorios ocupados por Israel con los alemanes voluntarios para servir en las SS o cuando declara que los hijos de los colonos judíos de Hebrón se forman como los de las juventudes hitlerianas... o cuando denuncia la utilización del Holocausto por Israel.
ZIMMERMAN: En una conferencia que he pronunciado sobre la utilización del Holocausto, he recordado que es frecuente y, que está bien visto decir, que el Holocausto es la principal justificación de la instauración de Israel. Si ello fuera así nosotros deberíamos estar agradecidos a Hitler... por esta contribución tan eminente al sionismo.. Uno de los oyentes escribió en el diario Haaretz que yo había dicho que era necesario agradecer a Hitler mientras que lo que dije fue todo lo contrario.
PERIODISTA: Los judíos en el Mein Kampf son designados como un virus a destruir. Este libro ha sido considerado como un plan operativo de Hitler, que expresa su intención de destruir a los judíos.
Z: ¿Entonces por qué se tuvo que esperar dos años y medio para legislar las Leyes de Nuremberg?
¿Si tenía la intención premeditada de destruir a los judíos habrían sido necesarias las leyes?
[144]
Tomemos el ejemplo de la Noche de Cristal.
Durante la conmemoración del putsch de 1923, el tema era la expulsión de los judíos polacos fuera de Alemania. En su discurso Hitler no habla nada de asesinarles. Pero, tomando como pretexto el asesinato en París de un diplomático alemán a manos de un joven judío, Goebbels, para hacerse valer, organizó el progrom.
P:¿Considera que todos los alemanes son culpables?
Z: Las investigaciones desde hace 20 años demuestran que los que no han tenido otro vínculo con el nazismo que el de haber votado por Hitler en 1933, bajo pretexto del desorden imperante en Alemania, tienen una parte de responsabilidad, aunque digan que no imaginaban que el régimen iría hacia tales extremismos. Pero yo no incrimino a cada individuo... El nazismo ilustra una situación en la que la mayoría de un pueblo elige o ignorar o colaborar con los primeros horrores. He estudiado este fenómeno, y es con esta vara con la que mido la situación de Israel: No escucho apenas protestas públicas contra la inmoralidad de la ocupación de territorios. Votar por un partido que aprueba la ocupación no está considerado como un gran crimen. Los soldados que parten como voluntarios para servir en los territorios ocupados por Israel están considerados como héroes, mientras que en verdad este voluntariado puede ser comparado al de los alemanes voluntarios para servir en las SS.
P: ¿En qué medida se puede establecer un paralelismo entre nuestra ocupación, y el hecho de imponer nuestra ley a los palestinos, con los horrores perpetrados por el nazismo?
Z: Nosotros tenemos mejores pretextos para actuar como lo hacemos. Pero hay un monstruo en cada uno de nosotros y si continuamos afirmando que siempre estamos justificados este monstruo puede agrandarse... Hoy ya pienso en un fenómeno que toma proporciones cada vez mayores: existe un sector entero de la población judía que defino, sin vacilación, como una copia de los nazis alemanes. Mire a los hijos de los colonos judíos de Hebrón, recuerdan exactamente a la juventud hitleriana. Desde su infancia se les ha imbuido la idea de que todo árabe es malo y que todos los no judíos están contra nosotros. Es una cosa de paranoícos: se consideran como una raza superior, exactamente como la juventud hitleriana. Rehevan Ze'evi (Ministro de 1990 a 1992 en el Gabinete de Shamir) solicitaba la expulsión (el traslado) de todos los Palestinos de los territorios. Este era el Programa oficial del Partido nazi: la expulsión de todos los judíos de Alemania.
P: Los judíos que no viven en Hebrón, que no votan por el Partido Kahane y que no son voluntarios para servir en las unidades especiales en los Territorios ¿Qué son según su criterio?
[145]
Z: Establezco una diferencia entre los voluntarios de las unidades especiales, y los soldados llamados al servicio militar... Pero incluso aquí, establezco un paralelismo con el Ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial... nosotros los judíos deberíamos acordarnos de que en el curso de aquella Guerra más de 100.000 soldados alemanes fueron ejecutados porque rehusaron participar en los crimenes contra la humanidad. A veces porque rechazaban matar a los judíos.
En el periódico israelí Haaretz del 5 de mayo de 1995, un artículo de Dan Margeli, amenazaba al profesor Zimmerman con ser expulsado de su cátedra en la Universidad. La petición estaba apoyada por 79 profesores (miembros del Likud o de los integristas religiosos). Zimmerman protestó contra este intento de expulsión en otro artículo publicado en el mismo periódico el 10 de mayo de 1995 recordando que la pretensión de estos profesores de hablar en nombre de la sana opinión del pueblo era parecida a la actitud de algunos universitarios nazis, que proponían expulsar ellos también de la Universidad a los oponentes del pensamiento único.
Se cita con frecuencia la frase de Heine: Cuando los libros se queman, el pueblo acabará también por ser quemado. Esto comienza incluso antes: cuando el Derecho legal a la libre expresión está amenazado los libros acabaran por ser quemados...
Me pregunto que si los que me quieren expulsar de la Universidad por causa de mis ideas van a recomendar quemar mis libros. Cada año miles de estudiantes los leen. ¿También ellos serán conducidos a la hoguera?
¿Son tan terribles mis opiniones respecto a los niños de Hebrón convocados a celebrar el primer aniversario de la muerte de Baruch Goldstein cuando comparo esta ceremonia con las manifestaciones de los nazis?
Lo que yo digo no tiene nada que ver con las tesis de los que quieren minimizar los crímenes hitlerianos... Como conocedor a fondo de la Historia del nazismo quiero poder advertir a la opinión del peligro potencial presente con toda verdad... Algunos piensan que estoy manipulado por el Gobierno alemán, aunque es necesario recordar, que cuando los revisionistas quisieron celebrar el 7 de mayo de 1995, un mitín para conmemorar que el 8 de mayo de 1945 (día de la capitulación nazi) no era sólo el día de la liberación sino también el primer día en el que los alemanes fueron expulsados del Este, la reunión fue prohibida por la presión de los oficiales.
Sería mejor que los que, en Israel, piensan que ellos defienden la verdad y la honestidad, la libertad de expresión y la investigación crítica, eviten colaborar con los enemigos de estos valores.
[146]
Siguiendo con la misma polémica en el Yediot Aaronot del 15 de mayo de 1995, el historiador Baruch Kimmerling, defendió también la libertad de expresión y la investigación crítica. Acusaba a los autores de la petición solicitando la expulsión del profesor Zimmerman: Se colocan en el terreno de la violencia y de la ideología, para tratar de imponer un régimen de terrorismo intelectual, politico e ideológico en la Universidad Hebraica... Sin libertad de pensamiento, como lo demuestran los ejemplos de las Academias nazis y bolcheviques, no es posible desarrollar una ciencia digna de este nombre...
Si el profesor Zimmerman fuera excluido, el espíritu del Senador McCarthy planearía sobre el campus de la Universidad Hebraica.
En Haaretz el 12 de mayo de 1995, Arieh Kaspy protestaba también contra el proyecto de expulsión del profesor Zimmerman: Ninguno de los 79 firmantes hizo esta petición cuando se reveló que nuestro Shabak practicaba la tortura. No se extrañaban cuando la gente moría durante los interrogatorios... No dicen nada cuando los colonos asesinan a los árabes... No han solicitado que se suprima el mausoleo sobre la tumba de Baruch Goldstein con esta inscripción: Baruch el héroe en Kiryat Arba, y tampoco han prometido que el acto de Goldstein no se repetirá en el futuro.
Una nota del periódico añade que la respuesta de estas personas es lenta y difícil por razones de financiación de las publicaciones: El judeo-nazismo, dice él, es muy popular entre los judíos de los países anglófonos, más incluso que en Israel: una simple llamada telefónica o un fax proporciona el dinero necesario para ayudar a cualquier texto judeo-nazi. Por el contrario los opositores al judeo-nazismo deben publicar a sus expensas.
NOTAS
1. Kimhe John, Palestine et Israël. Ed. Albin Michel.
1973, p. 27.
2. Kimhe John, Palestine et Israël. Ed. Albin Michel.
1973, p. 240.
3. Nadav Shragai, Haaretz, 13 de marzo de 1992.
4. Isaac Shamir, Looking back, looking ahead. 198, p. 574.
5. Washington Post, 3 de octubre de 1978.
6. Encyclopaedia of zionism and Israel. Herzl Press. Nueva
York, volumen II, p. 1262.
7. Herzl: Diaries. Ed. Victor Gollanz. 1958.
8. Herzl, Diaries. (passim).
9. Herzl, Diaries. 1, p. 56.
10. Herzl, L'Etat juif, p. 45.
11. Herzl, L'Etat juif, p. 209.
12. Herzl, Tagebuch. Vol. III, p. 105.
13. Herzl, Diaries, p. 224.
14. Conferencia central de Rabinos americanos. Yearbook VII,
1987, p. XII
15. Jewish Newsletter, 2 de junio de 1958.
16. Martin Buber, Israel
and the World, Ed. Schocken, Nueva York, 1948, p. 263.
17. Norman Bentwich. For Sion Sake. Biografía de
Judas Magnes. Philadelphia. Jewish Publication Society of America.
1954, p. 352.
18. Norman Bentwich. For Sion Sake. Biografía de
Judas Magnes. Philadelphia. Jewish Publication Society of America.
1954, p. 131.
19. Rabbin Moshé Menuhin, The Decadence of judaism in
our time, 1969, p. 324.
20. Le Monde, 21 de junio de 1960.
21. Carta publicada en Le Monde del día 19 de junio
de 1982, p. 9.
22. Ed. Calmann-Levy. 1972, p. 311.
23. Ed. Calmann-Levy. 1972, p. 311.
24. General Mosé Dayán. Jerusalem Post, 10
de agosto de 1967.
25. Ed. Gabalda, 2 vol. París, 1975.
26. Ver: Histoire d'lsraël, de M. Noth, traducción
francesa, casa Payot 1954, Théologie de l'Ancien Testament,
1971. Ed. Labor et Fides, Ginebra, por Von Rad, El Padre R. de
Vaux: Histoire ancienne d'lsraël (2 volúmenes),
París 1971.
27. Génesis 12/7.
28. Génesis 13/14-16; 28/13-15, 35/11-12.
29. Génesis 15/18-21, 17/4-8.
30. Cf. A. Alt, Der Gott der Väter (1929), in A. Alt,
Kleine Schriften zur Geschichte des Volkes Israel, I, Munich,
1953 (= 1963), p. 1-78 (Tr. ingl. en Essays on old Testament
History and Religion, Oxford, Blackwell, 1966, p. 1-77;
Die Landnahme der Israeliten in Palästina (1925),
in Kleine Schriften, I, p. 89-125 (Tr. ingl. idem, p. 133-169).
31. Françoise Smyth. Les Protestants, la Bible et lsraël
depuis 1948. En La Lettre de noviembre de 1984, n·313,
p. 23.
32. Ed. Labor et Fides. Ginebra 1994.
33. Cf. por ejemplo Génesis 13/14-17 o Gen 15/18-21.
34. La lectura de los textos sagrados del Oriente Medio nos enseña
que todos los pueblos en aquel lugar han recibido promesas similares
de su dios que les prometía la tierra, desde Mesopotamia
a Egipto, pasando por los Hititas.
En Egipto, sobre la estela de Karnak, mandada erigir por Tutmosis
III (entre el 1480 y 1475 a. de C.) para celebrar las victorias
que había cosechado en el camino de Gaza, Megido, Qadesh,
y hasta karkemish (en el Eúfrates), dios le dice: Te
asigno, por decreto, esta tierra a lo ancho y a lo largo. He venido
para darte la orden de que arrases la tierra de Occidente.
En la otra punta del creciente fértil, en Mesopotamia,
en la 6a tablilla del Poema babilónico de la creación,
el dios Marduk, fija a cada cual su lote (versículo
46), y para sellar la Alianza ordena reconstruir Babilonia y su
templo (a)
Entre ambos, los Hititas cantan a Arinna, la diosa solar:
Tú velas por la seguridad de los cielos y la tierra
Tú estableces las fronteras de la tierra (b)
Si los hebreos no hubieran recibido una promesa de este género,
¡sí que hubieran sido la excepción! (a).
(a) - Les religions du Proche-Orient de René Labet,
Ed. Fayard, 1970, p 60
(b) - Ibidem p. 557
(c) - Ver sobre la promesa, la tesis del Padre Landouzies, en
el Instituto Católico de París, en lo referente
a La donación de la Tierra de Palestina (1974),
pp. 10-15
35. Extractos de la conferencia pronunciada el día 10 de
febrero de 1975 en Cret-Berard (Suiza) durante un coloquio sobre
las interpretaciones teológicas del conflicto árabeisraeli,
publicado en la revista Etudes théologiques et religieuses,
n· 3, 1976 (Montpellier).
36. Rabbin Elmer Berger: Prophecy, Zionism and the state of
Israel. Ed. American Jewish Alternatives to Zionism. Conferencia
pronunciada en la Universidad de Leiden (Países Bajos)
el 20 de marzo de 1968.
37. Le Monde, (A. F. P. ) del 8 de noviembre de 1995.
38. El País (España), del 9 de noviembre
de 1995, p. 4.
39. Jueces XI, 24 y Reyes 11, 27.
40. I. Samuel XXVII, 19.
41. Traducción Ecuménica de la Biblia, p. 680, nota
d. (en la edición francesa).
42. Deuteronomio VI, 14.
43. Isaías XLV, 22.
44. Albright, Les Religions dans le Moyen-Orient, p. 159.
45. Poema babilónico de la Creación.Op.
cit. p. 329 a 341.
46. Ezequiel, XIV, 14 y 20.
47. Mircea Eliade. Histoire des croyances et des idées
religieuses, p. 190.
48. Mircea Eliade. Histoire des croyances et des idées
religieuses, p. 191.
49. Himno del Rig Veda 1;II, 7.
50. Himno del Rig Veda III, 18.
51. Himno del Rig Veda CXI, 11.
52. Jules Monchanin: Mystique de l'Inde, mystère chrétien,
p. 231-229
53. Números XXXI, 7-8.
54. Números XXXI,14-18.
55. Libro deJosué X, 34 a X, 36.
56. K. M. Kenyon, Digging up Jericho, Londres 1957,p. 256-265.
Jericho, en Archaelogy and Old Testament Study, Ed. D.
Winton, Oxford 1967, esp. p. 272-274. H. J. Franken Tell es-Sultan
and Old Testament Jericho, en OTS, 14(1965) p.189-200. M.
Weippert, Die Landnahme der israelitischen Stämme,
p. 54-55.
57. Père de Vaux (O. P.), Histoire ancienne d'lsraël,
Ed. Lecoffre et Gabalda. París 1971, TI, p.565. Ver: en
1933-35 por Judith Marquet-Krause, Les Fouilles de 'Ay,
(Et-Tell) París 1949. Después por J. A. Callawy
a partir de 1964, Cf. J. A. Callaway, Basor 178 (apr. 1965) p.
I3-40; RB, 72(1965) p. 409-415; K. Schoonover, RB 75 (1968), p.243-247;
76(1969) p. 423-426; J. A. Callaway, Basor, 196 (dic. 1969), p.
2-16.
58. Números XXI, 3.
59. Números XXI, 35.
60. Deuteronomio VII, 1-2.
61. Deuteronomio VII, 24.
62. Menahem Beghin, La révolte: Histoire de l'lrgoun,
p. 200. Ed. Albatros, 1978.
63. Jerusalem Post, 10 de agosto de 1977.
64. Exodo XXXIV, 16.
65. Deuteronomio VII, 6.
66. Deuteronomio VII, 3.
67. París, Payot, 1986, p. 104.
68. Esdrás6. 9, 2.
69. Esdrás. 10, 44.
70. Nehemias 13, 30.
71. Nehemias 13, 23-25.
72. Génesis 27, 46.
73. Jueces 14, 3.
74. Ver Joseph Badi, Fundamental Laws of the State of Israel,
Nueva York, 1960, p. 156.
75. Proceso de los grandes criminales de guerra ante el Tribunal
militar internacional (Nuremberg 14 de noviembre de 1945. 1·
de octubre de 1946. Texto oficial en lengua francesa. Sesiones
del 26 de abril de 1946, Tomo XII. D. 321).
76. Thomas Nelson, ThePuritans of Massachusets», Judaísmo,
Vol. XVI, n· 2, 1967.
77. Levítico 19,19.
78. Levítico 20,25.
79. Levítico 20,24.
80. Exodo 8,19.
81. Levítico 20,26.
82. Esd. 9,11.
83. Levítico 20,23.
84. Deuteronomio 7, 3-4.
85. Josué 23,12-13.
86. Más del 30 % de los americanos de la Brigada Abraham
Lincoln eran judíos, a los que denunciaba la prensa sionista,
porque combatían en España, en lugar de ir a Palestina.
En la Brigada Dombrovski, de 5.000 polacos, 2.250 eran judíos.
A estos heroicos judíos que lucharon en todos los frentes
del mundo con las fuerzas antifascistas, los dirigentes sionistas,
en un artículo de su representante en Londres, titulado:
¿Deben participar los judíos en los movimientos
antifascistas? respondía: ¡No!... y fijaban
el único objetivo: La construcción de la tierra
de Israel (Jewish Life, abril 1938, p.11).
87.Yvon Gelbner, Zionist policy and the fate of European Jewry»,
en Yad Vashem studies. Jerusalén. vol. XII, p. 199.
88. Tom Segev. Le Septième Million. Ed. Liana Levi,
París 1933, p. 539.
89. Memorandum del Comité de Salvación de la Agencia
Jud1á. 1943. Citado por Tom Segev. (op. cit).
90. Lucy Dawidowicz, A Holocaust reader, p. 155.
91. Lucy Dawidowicz, The war against Jews (1933-1945) Ed.
Penguin books, 1977, p. 23 1232.
92. A. Rosenberg: Die Spur des Juden im Wandel der Zeiten,
Munich 1937, p. 153.
93. Hohne. Order of the Death's Head, p. 333.
94. Ben-Yeruham, Le Livre
de Betar, T-II, p. 350.
95. Carta circular de Bulow-Schwante a todas las misiones diplomáticas
del Reich, n· 83, 28 de febrero de 1934.
96. Carta n· Z U 83- 21. 28/8 del 13 de abril de 1935.
97. Kurt Grossmann, Sionistes et non-sionistes sous la loi nazie
dans les années 30», Yearbook, Vol. VI, p.
310.
98. Leibowitz, Israël et Judaïsme, Ed. Desclée
de Brouwer, 1993. p. 116.
99. Ben Gourion et Shertok en Black: L'Accord de la Haavara,
p. 294. Citado por Tom Segev, op. cit. p. 30 y 595.
100. Gruenbaum, Jours de destruction, p. 68.
101. Citado por Tom Segev, op. cit. p. 158.
102. Citado por Tom Segev, op. cit. p. 125.
103. Hannah Arendt, Eichmann en Jerusalén (p. 134-141).
104. Isaías Trunk, Judenrat, Ed. Mac Millan. Nueva
York 1972.
105. Isaías Trunk, Judenrat, Ed. Mac Millan. Nueva
York 1972, p. 141.
106. Nahum Goldman. Autobiographie, Op. Cit. p. 157-158,
p. 260.
107. Ruth Bondy, The Emissary: a life of Enzo Sereni, p.
45.
108. Nahum Goldman, Autobiographie, op. cit. p. 170.
109. Bar Zohar, Ben Gurion. Le Prophète armé.
Fayard. París 1966. p. 99.
110. El texto en alemán se encuentra en el Apéndice
n· 11, en el libro de David Yisraeli: Le Problème
palestinien dans la politique allemande, de 1889 a 1945, Bar
Ilan University, Ramat Gan, Israel, 1974, p. 315-317.
111. E. Haber, Menahem Beghin, the man and the legend,
Ed. Delle Book. Nueva York, 1979, p. 385.
112. Bar Zohar, op. cit. p. 146.
113. Court record 124/53. Jerusalén District Court.
114. Alfred H. Lilienthal. What Price Israel. Chicago 1953,
p. 194-195.
115. Dr. Herzl Rosenblum, director de Yediot Aharonoth,
revelación hecha en 1958, y la justificación que
se dio en Jewish Newsletter N. Y. Noviembre 1958.
116. Yehuda Bauer, Juifs à vendre, Ed. Liana Levi,
París 1996. Traducción del inglés por Denis
Authier. (Yale University Press, 1994)., p. 84.
117. Ha'olam hazeh, 20 de abril y 1· de junio de
1966 y YediotAharonoth del día 8 de noviembre de 1977.
118. Klein. L'Etat juif, Ed. Dunod. París. p. 156.
119. T. Herzl, Diaries, p. 9.
120. T. Herzl, Diaries, p. 19.
121. Institute for Jewish Affairs de Nueva York, citado
por Christopher Sykes en Crossroads to Israel, Londres
1965 y por Nathan Weinstock: Le Sionisme contre Israël,
p. 146.
122. Yehuda Bauer, Juifs à vendre, Les négociations
entre nazis et juifs. 1933-1945. Ed. Liana Levi, París
1996. Traducción del inglés por Denis Authier. (Yale
University Press, 1994).
123. Cf. supra p.61, textos de Tom Segev.
124. Yehuda Bauer, p. 352.
125. Yehuda Bauer, p. 354
126. Yehuda Bauer, p. 72.
127. Yehuda Bauer, p. 167.
128. Yehuda Bauer, p. 189.
129. Yuehuda Bauer, p. 148.
130. Yehuda Bauer, p. 283.
131. Yehuda Bauer, p. 260.
132. Yehuda Bauer, p. 326.
133. Yehuda Bauer, p. 227 y 229.
134. Yehuda Bauer, p. 265.
135. Yehuda Bauer, p. 343.
136. Yehuda Bauer, p. 347.
137. Yehuda Bauer, p. 393.
138. Imaginemos que en este tribunal hubieran tomado asiento los
representantes de los países neutrales, o representantes
de los paises colonizados : los indios de Asia o de América,
los negros de Africa, asiáticos, que sufren desde hace
quinientos años la feroz dominación que Hitler había
infringido a los blancos.
139. En 1919, el célebre economista Lord George Maynard
Keynes, decía: Con un tratado así, en veinte
años tendréis una nueva guerra.
140. Los Estados Unidos produjeron cerca de 135.000 toneladas
de agentes químicos tóxicos durante la guerra, Alemania
70.000 toneladas, el Reino Unido 40.000 toneladas y Japón
7.500 toneladas.
141. I.M.T. Vol. XXXI p. 65
142. Paul Baudouin, Neuf Mois au gouvernement, La Table
Ronde, 1948, p. 57.
143. American Heritage n· de agosto-septiembre 1985.
144. Citado por el Almirante Doenitz, Dix ans et vingt jours,
p. 343-44.
145. Las referencias limitadas a un número remiten a los
minutos del juicio de Toronto de 1988, publicadas por Bárbara
Kulaszka, Toronto, agosto 1992.
146. High-grade lynching party in Nuremberg. (5.995-996) p. 716.
147. En su libro The Jewish paradox (Grosset& Dunlap,
1978, p. 122) el Doctor Goldman precisa: Durante la guerra,
el Congreso Mundial Judío abrió una sede de un Instituto
para los asuntos judíos en Nueva York. Los directores fueron
dos grandes juristas judíos lituanos,Jacob y NehemiahRobinson.
Gracias a su esfuerzo, el instituto elaboró dos ideas completamente
revolucionarias: el Tribunal de Nuremberg y las reparaciones alemanas.
148. Documentos de la URSS 54, en el volumen 39 del T. M. I. p.
290.32.
149. Estatutos del Tribunal de Nuremberg, XV, p. 300.
150. Proceso de Nuremberg, tomo IV, p. 657.
151. Revista de Historia de la Segunda Guerra Mundial, octubre
1956.
152. La revista inglesa Week end del 25 de enero de 1961,
que publicaba en su portada la fotografía de Hoettl, coneste
titular: Historia de un espía más raro que la
ficción: este amigo de los dirigentes nazis tenía
por jefe a un hombre de los servicios secretos británicos.
153. Olga Wurmser-Migot. Le Système concentrationnaire
nazi. P. U. F. 1968, p. 544 y p. 13.
154. Lucy Dawidowicz. The War against the jews, 1975. p.121.
155. Walter Laqueur, The terrible secret, Francfort de
Main, Berlín, Viena 1981, p. 190.
156. Le Soir, Bruselas, 19-20 de octubre de 1991, p. 16.
157. Artículo de Luc Rosenzweig, en Le Monde del
27 de enero de 1995.
158. The Revised Hilberg. Simon Wiesenthal Annal Vo1.,
3.1986. p.294.
159. La Destruction des Juifs d'Europe, Raul Hilberg, p.
4-82.
160. Gerald Flemming. Hitler un die Endlösung. Wiesbaden-Munich.
1982. p. 56.
161. Joseph Billig. La Solution finale de la question juive.
París 1977, p. 58.
162. N. G. 2586.
163. 33. 93739374. Referencia a los minutos del Proceso de Toronto
de 1988.
164. Permite ciertamente decir aquello de no importa que no importa
a quien. Durante la ocupación, un mensaje
cifrado de Londres, decía por ejemplo: No olvidéis
reuniros con Margarita que significaba, haced saltar el puente
tal.
165. Poliakov. Le Procès de Jerusalem. París,
1963, p. 152.
166. Gerald Reitlinger. La Solution finale, p. 19.
167. Hilberg (op. cit) 2a edición p. 401 (N. G. 2586-E.
P. S. 710).
168. International Military Trial IX, 575.
169. Pieza justificativa n· 464 del proceso de Eichmannn
en Jerusalén.
170. Vierteljahreshefte, 1957, 197.
171. Documento N. G. 3933, del proceso de la Wilhelmstrasse, citado
por Reitlinger. The final solution, p. 79, donde éste
interpreta todavía en el sentido de ficción
o camuflaje sin dar para ello la menor justificación.
172. P. S. 710 T. XXVI, p. 266.
173. International Military Trial IX, p. 552.
174. N. G. 2586 G.
175. Documents on German Foreign Policy, 1918-1945. Serie
D, Vol. X. p. 484.
176. Conferencia de Wannsee, 13-3133.
177. Conferencia de Wannsee, 33-9372-9373.
178. M. Robert N. W. Kempner, Eichmann und komplizen, Europa
Verlag 1961.
179. P. S. 1919, T XXLX, p. 145.
180. P. S. 1919, T XXIX,p. 55.
181. P. S. 1919, T XXIX, p. 47.
182. P. S. 1517, T. XXVII, op. 270.
183. P. S. 1919, T XXIX,Tomo XI, p. 562.
184. Cf. Revue d'Histoire de la Seconde Guerre mondiale,
1· de octubre de 1958, p. 62.
185. Eberhard Jaeckel y Jurgen Rohwer. Der ord an den Juden
im Zweiten Weltkrieg (La muerte de los judíos durante la
Segunda Guerra Mundial) D. V. A. 1985 p. 67.
186. Conferencia de Wannsee sobre la expulsión de los Judíos
hacia el Este, p. 114.
187. Testimonio de Kurt Becher. 8 de marzo de 1946. P. S. 3762.
188. Testimonio de Kurt Becher. 8 de marzo de 1946. 4-861 a 864.
189. Testimonio de Kurt Becher. 8 de marzo de 1946. 4.867.
190. P. S. 702. Henri Monneray. La Persécution des juifs
dans les pays de l'Est présentée à Nuremberg.
C. D. J. C. 1949.
191. Hannah Arendt, Le Système totalitaire. París
1972, p. 182.
192. German crimes in Poland. Varsovia, 1946, I. p. 37.
193. N. O. 020-a.
194. Centro del Museo de Auschwitz, 6-1962, p. 78.
195. Página 109 de la exposición de motivos del
veredicto.
196. Carta de Pinter al semanario católico Our Sunday
visitor, 14 de junio de 1959, p. 15.
197. Rudolf Höss, Commandant à Auschawitz: l'autobiographie
de Rudolf Höss, p. 174.(5. 956).
198. Documento n·-1210.
199. Ruppert Butler, Legions of Death Ed. Hamlyn Paperbacks.
200. Entrevista del Juez Edward L. Van Roden a la revista The
Progressive, de febrero de 1949.
201. Hermann Langbein, Der Auschwitz-Prozess, Europäische
Verlagsanstalt, Francfort. 1965.
202. Cote P. S. 1553.
203. Publicado en 1953 por Jean-Paul Sartre en Les Temps Modernes,
traducido por Tibere Kremer,Julliard, 1961.
204. N.0.4.401.
205. Die Zeit, 19 de agosto de 1960.
206. I.M.T. son las iniciales del International Military Trial
en el que fueron juzgados los mayores responsables del régimen
hitleriano. N.M.T. (Nuremberg Military Trials) designa un conjunto
de juicios posteriores que enjuició a criminales de menor
importancia, aunque algunos de estos acusados comparecieron en
varios de estos procesos. Fue el caso por ejemplo del General
Ohlendorf, inculpado en el 9· de estos procesos (volumen
4 del N.M.T. )
207. (I.M.T. Vol. IV, p. 311-355 y I.M.T. Vol. XXII, p. 478-480;
491-494; p. 509-510; 538
208. N.M.T. caso 9.
209. N.M.T. Vol. IV p. 223-312.
210. Robert Merle: La mort est mon métier. Ed. Gallimard.
1952. Folio p. 365-366.
211. Agence Télégraphique juive, 20 de junio de
1986. The Jewish Journal. N. Y. 27 de junio de 1986
p. 3.
212. Libération, 7 de marzo de 1979.
213. Bulletin municipal officiel de Paris. Debate de los
reunidos, Consejo Municipal de París, sesión del
27 de octubre de 1962, p. 637.
214. Le Monde, 17 de enero de 1963.
215. Elie Wiesel: Paroles d'étranger. Ed. del Seuil.
1989, p. 192, p. 86.
216. Juicio de Toronto. (33. 9399-9. 400).
217. Le Nouvel Observateur, 26 de abril de 1985.
218. Libération, 25 de abril de 1985, p. 22.
219. The Daily Telegraph, Londres 22 de marzo de 1916,
p. 7 y The Daily Telegraph, Londres 25 de junio de 1946,
p. 5.
220. Informe Leuchter n· 9.004.
221. Informe Leuchter n· 6.005.
222. Informe Leuchter n· 7.001.
223. Informe Leuchter n· 12.002.
224. Informe Leuchter n· 32.9121.
225. Informe Leuchter n· 33.145.
226. Redactado en Malden. Massachusetts, el 5 de abril de 1988.
Fred Leuchter Jr. Ingeniero jefe.
227. (5-1123).
228. Informe Leuchter, op. cit. 14006.
229. Referencias del Instituto. 720.90. Referencia del Museo 1-8523/51/1860.89.
230. (32.9100,9101).
231. (14.008).
232. The Holocaust revisited: A retrospective Analysis of the
Auschwitz Birkenau Extermination Complex) C. I. A. febrero 1979.
Washington D. C. 19 páginas.
233. L'Album d'Auschwitz. Editions du Seuil para la edición
y la traducción francesa. París 1983.221 páginas.
234. Air Photo Evidence. Ball Resource limited. Suite 160.7231
120 th street Delta, B. C. Canada 4C6PS.1992.
235. Raul Hilberg, La Destruction des juifs d'Europe, 2a
edición, p. 978.
236. Proceso de Toronto, 27-736 a 738.
237. Números XXI, 35.
238. Josué X, 37.
239. Josué XI, 14.
240. Paul-Marie de la Gorce: 1939-1945. Une guerre inconnue.
Ed. Flammarion. París 1995, p. 535.
241. Churchill, La Deuxième Guerre mondiale, Volumen
VI.
242. Paul-Marie de la Gorce: 1939-1945. Une guerre inconnue.
Ed. Flammarion. París 1995, p. 532.
243. Paul-Marie de la Gorce: 1939-1945. Une guerre inconnue.
Ed. Flammarion. París 1995, p. 533.
244. Saturday Review of Literatura del 5 de junio de 1944.
245. W. F. Albright, De l'âge de pierre à la chrétienté.
Le monothéisme et son évolution Traducción
francesa: Ed. Payot, 1951.
246. W. F. Albright, De l'âge de pierre à la chrétienté.
Le monothéisme et son évolution Traducción
francesa: Ed. Payot, 1951, p. 205.
247. Larousse Universel, 2 volúmenes, París, 1969,
p. 772.
248. Le Monde, 18 de julio de 1990, p. 7.
249. Office francés de ediciones, 1945, p. 7.
250. Raul Hilberg, La Destruction des Juifs d'Europe. Edición
en inglés, Holmes and Mayer, 1985, p. 895.
251. Raul Hilberg, La Destruction des Juifs d'Europe. Fayard
1988.
252. Le Monde, 23 de julio de 1990.
253. The American Jewish Year Book, n· 5702, del
22 de septiembre de 1941 al 11 de septiembre de 1942, vol. 43,
publicado en Filadelfia por The Jewish Publication Society
of America, indica en la página 666, que después
de la expansión máxima nazi, incluso en Rusia, y
contando a los judíos que se quedaron en Alemania, en 1941,
había en la Europa sometida a Alemania tres millones ciento
diez mil setecientos veintidós (!) judíos. ¿Cómo
se pudieron exterminar seis millones?
254. The War against theJews. Penguin books, 1987 p. 191.
255. Der Tod ist ein Meister im Dritten Reich. Ed. Hoffmann
und Campe, 1991, p. 217.
256. Raul Hilberg, La Destruction des Juifs d'Europe. Edición
en ingles, Holmes and Mayer, 1985.
257. Documento de Nuremberg P. S. 3311.
258. Traducida al francés bajo el título, Un
témoignage devant le Monde. Ed. Self, París
1948.
259. Contradiciendo así una vez más las decisiones
de Nuremberg que se fundaban en la existencia de gaseamientos
en los campos de concentración. El Sr. Martín Broszat
llegó a ser, en 1972, Director del Instituto de Historia
contemporánea de Munich. La revelación era por otra
parte más importante que una mera cantidad de testimonios,
de testigos oculares habían afirmado la existencia de las
cámaras de gas en estos campos de concentración
y que una puesta en escena reconstruyendo la cámara de
gas de Dachau era el documento que más impresionaba a los
visitantes.
En el Tribunal de Nuremberg, Sir Harley Shawcross, el 26 de julio
de 1946, menciona las cámaras de gas no estaban solo en
Auschwitz y en Treblinka, sino también en Dachau (TMI,
tomo 19, p. 4563).
260. Boaz Evron, Le Génocide: un danger pour la nation,
Iton 77 n· 21, mayo-junio 1980, p. 12 y ss.
261. Padre Morelli, Terre de détresse Ed. Bloud
et Gay, 1947, p. 15.
262. Ouest-France, 2 y 3 de agosto de 1986, p. ó.
263. Libération, del 5 de marzo de 1979, p. 4.
264. Martín Broszat, Die Zeit, p. 14.
265. Le Sionisme contre Israël. Ed. Maspero, 1969,
p. 315.
266. Le Monde, 15 de octubre de 1971.
267. Declaración de Beghin en Oslo. Davar. 12 de diciembre
de 1978.
268. Moshé Dayan, Jerusalem Post 10 de agosto de
1967.
269. Menahem Beghin: The revolt: story of the Irguen, p.
335.
270. New York Times, 6 de diciembre de 1953.
271.Jerusalem Post, 10 de agosto de 1967.
272. Sumner Welles, We Need not Fail, Boston, 1948, p.
63.
273. Les Mémoires de Forrestal, N. Y. The Viking
Press. 1951, p. 363.
274. Menahem Beghin, La Révolte: Histoire de l'lrgoun
p. 162 de la edición inglesa.
275. Menahem Beghin, La Révolte: Histoire de l'Irgoun,
p. 162, que corresponde en la edición francesa a la p.
200.
276. U. N. Documento A. 648, p. 14.
277. Sobre el asesinato del conde Bernardotte, ver el informe
del General A. Lundstrom (que se encontraba sentado en el vehículo
de Bernardotte), informe dirigido, el mismo día del atentado,
17 de septiembre de 1948, a las Naciones Unidas. También
el libro publicado por este General con motivo del 20·
aniversario del crimen, L `Assasinat du Comte Bernardotte,
impreso en Roma (Ed. East. A. Fanelli ) en 1970, con el título:
Un tributo a la memoria del Comte Folke Bernardotte. El
libro de Ralph Hewins: Count Bernardotte, his life and work
(Hutchinson, 1948). Y, en el semanario milanés Europa,
las confesiones de Baruch Nadel (citadas en Le Monde
del 4 y 5 de julio de 1971).
278. Isaac Zaar: Rescue and liberation: America's part in the
birth of Israel, N. Y. Bloc Publishing Cy. 1954 p.115.
279. Israel Hahak, Le Racisme de l'Etat d'Israël,
p. 57.
280. Ce sont mes frères que je cherche. Ministerio
de Educación y de Cultura. Jerusalén 1990.
281. Tom Segev. op. cit. p. 473.
282. Jossep Weitz, Journal, Tel-Aviv, 1965.
283. Fondo Nacional Judío. La ley promulgada el 23 de noviembre
de 1953.
284. Fondo de Reconstrucción. Ley promulgada el 10 de enero
de 1956.
285. Hapraklit, febrero 1946, p.58-64.
286. Israel Shahak, Le Racisme de l'Etat d'Israël,
p. 152 y ss.
287. Henry Katzew, South Africa: a country whithout friends,
citado por R. Stevens (Zionism, South Africa and
Apartheid).
288. Claude Klein, Director del Instituto de Derecho Comparado
en la Universidad Hebraica de Jerusalén. Le Caractère
juif de l'Etat d'Israël. Ed. Cujas. París 1977,
p.33.
289. Claude Klein, Director del Instituto de Derecho Comparado
en la Universidad Hebraica de Jerusalén. Le Caractère
juif de l'Etat d'Israël. Ed. Cujas. París 1977,
p.35.
290. Ley del Nacionalidad n· 5712-1952.
291. Resolución de la
Asamblea General de la O.N.U., del 10 de noviembre de 1975. Resolución
3379 - xxx.
292. Ahad Ha'am. Obras completas en hebreo. Tel-Aviv. Devir
Publ. House. 8 a edición, p.23.
293. Informe Peel, capítulo 8 &19, p.214.
294. Le Monde, 18 de abril de 1993.
295. Estos textos israelíes fueron reproducidos en Le
Monde del 18 de abril de 1991.
296. Le Monde, 12 de septiembre de 1993.
297. Israel Shahak: Le Racisme de l'Etat d'Israël,
p. 263.
298. Israel Shahak: Le Racisme de l'Etat d'Israël,
p. 93.
299. Alain Cotta. Le Capitalisme dans tous ses états.
Ed. Fayard. 1991. p. 158.
300. Lloyd George, The Truth about the Peace treaties Ed.
Gollancz, 1938, vol. 2 p. 1138-39.
301. Melvin I. Wrofsky: We are one! American jewry and Israel,
Nueva York, 1978, Ed. Ander Press. Doubleday, p. 265-266.
302. Bick, Ethnic linkage and Foreign policy. p. 81.
303. Willian Eddy, F. D. Roosevelt and lbn Saoud. N.Y. American
friends of the Middle East, 1954, p. 31
304. Clement Atlee. A Prime Minister Remember. Ed. Heinemann.
Londres 1961, p. 181.
305. Melvin I. Wrofsky, op. cit. p. 265-ó y 271 a la 80.
306. Edward Tivnan, The lobby, p. 56, que cita al biógrafo
de Ben Gurion, Michel Bar Zohar.
307. I. L. Kenan. Israel's defense line, Buffalo. Prometheus
book. 1981, p. 66-67.
308. Schlomo Avineri: The making of Modern Sionism. N.
Y. Basic Book, p. 219.
309. Bick, Ethnic linkage and Foreign policy, p. 65 y 66.
310. Abba Eban, Autobiographie. p. 460.
311. Steven L. S. Spiegel: The other arab-israeli conflict.University
of Chicago Press. 1985, p. 185.
312. I. L. Kenan. Israel's defense line, Buffalo. Prometheus
book. 1981, p. 239.
313. Neff, Warriors of Jerusalén, p. 217.
3 14. Bick, Ethnic linkage and Foreign policy. p. 65 y
Abba Eban, Autobiographie, p. 460.
315. Stephen D. Isaacs.Jews and American politics, N. Y.
Ed. Doubleday. 1974. capítulo 8.
316. El texto íntegro lo reproduce Shechan. Arabis Israelis,
and Kissinger.Reader's digest press, p. 175.
317. Time, 21 de junio de 1976.
318. Silver, Beghin: The haunted prophet, p. 164.
319. Stern. Nueva York. 24 de abril de 1978.
320. Entrevista de Cyrus Vance a Edward Tivnan: The lobby.
Ed. Simon and Schuster. 1987 p. 123.
321. Stephan D. Isaacs: Jews and American Policy. Poubleday,
1974, p. 122.
322. Washington Post, 10 de junio de 1981.
323. Facts and files. 20 de septiembre de 1981, p. 705.
324. N. Y Times, 1 · de diciembre de 1981.
325. Steven Emerson, Dutton of Arabia, en New Republic
del 16 de junio de 1982.
326. Ze'ev Shiff y Ya'ari: Israel's Lebanon War. N. Y.,
Simon and Schuster, 1984.
327. Michael Kremer: American Jews and Israel. The schism,
N. Y., 18 de oaubre de 1982.
328. Entrevista recogida por Tivnan (op. Cit.) p. 181.
329. Time, Power, glory-politics, 17 de febrero de 1986.
330. Time Magazine de junio de 1994.
331. Kivoulim, Jerusalén, n· 14, febrero
1982, páginas 49 a 59. El texto íntegro, en su original
hebreo, esta reproducido en mi libro: Palestine, terre des
messages divins. Ed. Albatros. París 1986, p. 377 a
387, y en su traducción francesa a partir de la página
315.
332. Alain Peyrefitte: Le Figaro, 5 de noviembre de 1990.
333. Wall Street Journal del 24 de junio de 1987.
334. Rebirth and Destiny of Israel, 1954, p. 489.
335. Ben Gurion: Tasks and character of a modern sionist,
Jerusalem Post del 17 de agosto de 1952 y Jewish
telegraphic agency del 8 de agosto de 1951.
Nada ha cambiado en esta actitud desde hace un medio siglo. El
Gran Rabino de Francia Joseph Sitruk declaraba en Jerusalén
al Primer Ministro israelí Itzhac Shamir: cada judío
francés es un representante de Israel... Esté seguro
que cada judío en Francia es un defensor de lo que Vd.
defende.
Fuente: Radio israelí del lunes 9 de julio de 1990,
recogida por Le Monde del 12 y del 13 de julio de 1990
y por el diario de la Comunidad Judía de Francia:Jour
J., del jueves 12 de julio de 1990, donde se añadía:
No hay en mi ánimo la menor idea de una doble fidelidad.
¡Se podría haber equivocado!
336. Citado por Georges Friedman en Fin du peuple juif,
Gallimard 1956, Idées poche, p. 292.
337. Washington Post, 5 de diciembre de 1985.
338. Haaretz, 1· de diciembre de 1985.
339. Paul Findley, They dare to speak out, publicado en
1985 por Lawrence Hill and Company, p. 31.
340. Adlaï Stevenson, Foreign Affairs 75-76, p. 126.
341. Adlaï Stevenson, Foreign Affairs 75-76, p. 143.
342. Adlaï Stevenson, Foreign Affairs 75-76, p. 161.
343. Adlaï Stevenson, Foreign Affairs 75-76, p. 179.
344. Adlaï Stevenson, Foreign Affairs 75-76, p. 92.
345. N. Y Times, 15/5/95. Fuente: Dany Rubinstein, Haaretz,
mayo 1995.
346. Reproducido por Middle East International 26-05-1995.
347. Paul Findley, They dare to speak out, p. 315. Fuente:
Hearing. Parte 9. 23 de mayo de 1963.
348. Philippe Alexandre, Le Préjugé pro-israélien,
Le Parisien Libéré del 29 de febrero de 1988.
349. Proposición de Ley adoptada por la Asamblea Nacional,
transmitida por el Sr. Presidente de la A. N. al Sr. Presidente
del Senado, n· 278, anexa al atestado de la sesión
del 3 de mayo de 1990.
350. Proposición de Ley (p. 21).
351. Proposición de Ley (artículo 7).
352. Proposición de
Ley (p. 5). Informe n· 1296, anexo al atestado de la sesión
del 26 de abril de 1990.
353. Diario oficial del 22 de junio de 1991, p. 3571. Debates
parlamentarios, 2a sesión del 21 de junio de 1991.
354. Bernard-Henri Lévy. L'Idéologie française.
Grasset, 1981, p. 61, 92 y 125.
355. De Gaulle, Le Monde, 9 de julio de 1990.
356. De Gaulle, Mémoires I, p.389.
357. De Gaulle, Mémoires I, p. 130.
358. De Gaulle, Mémoires I, p. 107.
359. De Gaulle, Mémoires I, p. 388, en Brazzaville.
360. De Gaulle, Mémoires I, p. 74.
361. De Gaulle, Mémoires I, p. 342.
362. De Gaulle, Mémoires I, p. 394.
363. De Gaulle, Mémoires III, p. 301.
364. De Gaulle, Mémoires III, p. 442.
365. De Gaulle, Mémoires III, p. 494.
366. Le Monde, miércoles 22 de septiembre de 1982,
p. 2.
367. Y. Leibowitz: Israël et Judaïsme, Desclée
de Brouwer, 1993, p. 113 (capítulo sobre las fuentes del
antisemitismo).
368. Le Méridional. Lunes 14 de mayo de 1990.
369. Var Matin magazine, del lunes 15 de abril de 1995.
Artículo de los reporteros Michel Letereux y Michel Brault.
370. del mismo artículo de Var Matin, del lunes
15 de abril de 1995.
371. Israel Shalak, Le Racisme de l'Etat d'Israël,
p. 152 y ss.
372. Los estudiantes de la Organización socialista israelí:
Matzpen. P. O. Box 2234. Jerusalén.
373. Nahum Goldman Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 262.
374. Nahum Goldman Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 263.
375. Nahum Goldman Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 268.
376. Nahum Goldman: Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 272.
377. Nahum Goldman: Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 282.
378. Nahum Goldman: Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 283.
379. Nahum Goldman Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 286.
380. Nahum Goldman Autobiographie. Ed. Fayard, París
1969, p. 284.
381. The Israeli Economist de septiembre de 1967, n·
9.
382. Según las estadísticas de la O.N.U. aparecidas
en La corriente internacional de capitales a largo plazo y
las donaciones públicas (1951-1959), citadas por Georges
Corm en les Finances d'Israël (IPS, 1968).
383. Jacques Bendélac: Les Fonds extérieurs d'Israël,
Ed. Economic. París 1982.
384. T. Stauffer, Christian Science Monitor, del 20 de
diciembre de 1981.
385. Michel Bar Zohar: Ben Gurion, le prophète armé,
Ed. Fayard, París, 1966, Capitulo 27.
386. State of Israel Bonds, Jerusalem-NewYork, Americ. Jewish
Yearbook, 1972, p. 273; 1978, p. 205; 1980, p. 153.
387. Statistical abstract of Israel (annuel) y Bank of Israel,
Annual reports.
388. Jacques Bendélac: Les Fonds extérieurs d'Israël,
p. 76.
389. Jacques Bendélac: Les Fonds extérieurs d'Israël,
p. 79
390. Hasta 1977: Trésor, Division des échanges
extérieurs. De 1978 a 1981. Embajada de los Estados
Unidos
(Tel-Aviv).
391. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
Publicado en hebreo, en Jerusalén, en 1987 y traducido
al francés,
por las Editions Desclée de Brouwer en 1993.
392. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 255.
393. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 182.
394. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 182.
395. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 182.
396. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 31.
397. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 225.
398. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 226.
399. Yeshayahou Leibowitz, Israël etJudaïsme.
p. 253.
400. Roger Garaudy, Palestine, terre des messages divins,
p. 206 a 214.
401. Henri Rollin, L'Apocalypse de notre temps, Gallimard
1939.
402. Reedición, Allia 1991.
403. Partido Nacionalsocialista 1708.
404. Broszat, Jacobsen, Krausnick: Anatomie des S. S. Staates,
Munich. 1982. vol. II, p. 263.
405. Informe de Heydrich a Goering de fecha 11 de noviembre de
1938, Nur. T. IX p. 554. Documento reconocido como auténtico
por Goering y los demás acusados.
406. Documento del Partido Nacionalsocialista (P.S.) 3063 que
lleva la fecha del 13 de febrero de 1939, Nur. T.
XXXII, p. 29.
407. P. S. 1412 Reichsgesetzblatt 1938, parte I, página
1579.
408. P. S. 2875. Reichsgesetzblatt 1938, parte I, página
1580.
409. P. S. 2694. Reichsgesetzblatt 1938, página 1581.
410. Michael Bar Zohar. Ben Gourion. Le Prophète armé.
p. 139.
411. Journal del antiguo Primer Ministro de Israel, Moshé
Sharett, publicado en hebreo en 1979.
412. International Herald Tribune, del 8 de junio de 1982.
413. Mazor,Il y a trente
ans, la Conférence d'Evian, en Le Monde Juif,de
abril-junio de 1968, n· 50; p. 23 y 25.
414. Alfred Grosser, Dix leçons sur le nazisme París
1976, p. 216.
415. Leon Poliakov. Bréviaire de la haine. p. 41.
416. Leon Poliakov. Bréviaire de la haine. p. 41.
417. Vierteljahresheftefur Zeitgeschichte 1957, p. 197.
418. Gerald Fleming: Hitler und die Endlosung. Wiesbaden-Munich.
1982, p. 56.
419. N. G. 2586-B.Ver Documents on German Foreign Policy (1918-1945).
Series D, Vol. X. Londres 1957, p.111-113.
420. P. S. 22. 33. I.M.T. vol. XXIX, p. 405.
421. N. G. 2586 G.
422. N.G.5570.
423. Adolfo Hitler: Monologues 1941-44. Albrecht Krauss
Verlag. Hambourg 1980, p. 241.
424. H. Monneray: La Persécution des juifs dans les
pays de l'Est, p. 91-92.
425. Les Crématoires d'Auschwitz (1993), Jean-Claude
Pressac p. 65.
426. Les Crématoires d'Auschwitz (1993), Jean-Claude
Pressac p. 74.
427. Les Crématoires d'Auschwitz (1993), Jean-Claude
Pressac p. 88 a 109.
Título original: Roger
Garaudy, Les
Mythes fondateurs de la politique israélienne. 2a édicion:
Samiszdat Roger Garaudy, Paris, 1996.
No copyright. Reproduction libre.
© Historia XXI Ap. C. 14.243 08080 - Barcelona 1a edición:
Diciembre 1997 Traducción: José Luis Jérez
Riesco. ISBN: B-84-923089-0-7 Depósito legal: B.48.721-97.