"a una familia de servidores del Estado y considero odioso que a finales del siglo XX haya escritores e historiadores que, dedicándose a sus respectivas tareas, como es escribir libros que pueden estar completamente equivocados, se encuentren brutal e indirectamente amenzados con la cárcel y multas costosísimas por haber expresado en el terreno histórico opiniones que non son conformes a las de las leyes recientemente votadas por iniciativa de pudientes grupos de presión y de otros enemigos de la libertad de expresión en nombre de la cual hemos hecho dos guerras mundiales en este país" (David Irving, palabras de abertura en la corte de justicia, 12 de enero 2000)
(Véase el texto completo, y a una biografía completa de Irving el Atlantic Monthly, february 2000, en este sitio web.)
David Irving es un hisoriador no universitario y especialista de Hitler. Ha gozado del mayor éxito hasta el día en que las conoclusiones a las que llegaba tras descubrir y analizar documentos hallados por él, y que él solo alcanzaba a interpretar suscitó la cólera de las organizaciones judías internacionales. Lo que estas le reprochan tiene que ver con lo que él plantea sobre Hitler (en su libro Hitler's War); en su opinión Hitler no quiso llegar al exterminio de los judíos, cosa que sucedió sin que la avalara; por otra parte, él no cree en las cámaras de gas y plantea que pudo haber de uno a cuatro millones de víctimas judías, que fallecieron principalmente por la sobrexplotación de los campos de concentración que eran campos de trabajo. Se mantiene alejado de los revisionistas extremistas y esto le ha valido ser criticado por ambos bandos.
La profesora auxiliar de historia judía de la universidad
Emory en Georgia, Estados Unidos, Deborah Lipstadt, con la arrogancia
característica de todos los voceros de esa movida que se
siente segura de la impunidad, le ha acusado en un libro (Denying the Holocaust
(se puede leer en este mismo sitio AAARGH; la cita incriminada
se encuentra página 161) de malinterpretar los documentos
y torcer los hechos. Las organizaciones judías procuraron
a partir de ahí convencer a los editores de Irving de cortarle
todas las vías de la edición y la distribución;
como siempre sucede, lo lograron, y se esfumaron los recursos
de Irving y su familia. Entonces Irving ha demandado a la Lipstad
y a su editor inglés, Penguin, por difamación (libel).
El proceso ya le ha costado varios millones de dólares
a los acusados, y se abrió en Londres el doce de enero
2000. Será juzgado por un juez único, especialista
en difamación, el juez Gray. No habrá jurado pues
el juez dictaminó en ese sentido, según lo autoriza
la ley, y sin que se opusiera ninguna de los dos partes; el motivo
aducido es que "saldría demasiado caro tener un jurado
tanto tiempo." Segón el derecho inglés, es
el acusado el que tiene que aportar las pruebas, demostrar que
no cometido difamación sino dicho la verdad; más
adelante existe la posibilidad, para el juez, de admitir la difamación,
si el enunciado, aunque fundado en la realidad factual, resulta
insultante en su formulación.
La acusada Lipstadt ya mandó a decir que no vendría a testificar, posiblemente por temor a tener que enfrentar actos antisemitas pues, según lo consabido, es una de las grandes plagas del mundo moderno, que afecta especialmente a Israel, siendo este país la flor y nata de la democracia; entre sus abogados comunes o Queen Counsels (abogados prestigiosos nombrados por el ministerio y autorizados a vestirse de seda, por lo que se les llama silk; no son semejantes a los decanos) se encuentra el que representó a la difunta ex-princesa de Gales en ocasión de su divorcio. Recordemos que el objetivo de la difunta era conservar el título de "real" sin ejercer ninguna de las responsabilidades correspondientes (los ingleses creen en la responsabilidad de la familia real) y perdió el brillante Queen Counsel. En cuanto a David Irving , él mismo se encarga de su defensa.
Irving se niega a que este proceso se convierta, como quisieran
tanto exterminacionistas como revisionistas, en el juicio del
holocausto. En tanto que especialista de Hitler, él defiende
sus competencias en ese campo y procurará en la medida
de lo posible que el proceso no se desvíe y se convierta
en un juicio más acerca de las cámaras de gas, lo
cual no le parece ser una cuestión medular. La primera
manifestación de esta voluntad tuvo lugar el 19 de enero
2000; confrontado a un documento muy conocido que afirma que 97
000 judíos fueron muertos por gases de escape pour un Einsatzgruppe,
él afirmó que no conocía la existencia de
ese documento, y lo reconoció como auténtico; añadió
: "un experto de Hitler, no del Holocausto" (véase
el artículo del Daily Telegraph).Nadie le perdona
esta actitud, pero nosotros opinamos que hace bien en defender
su libertad de opinión, ya que losgrandes procesos
revisionistas de Zündel no han aportado absolutamente nada
en cuanto a la reconquista del terreno científico. Tal
vez el proyecto de Irving, el de obligar a reconocer que Hitler
no es el diablo sino un mal hombre y por lo tanto digno de censura
lo mismo que tantos más, sea más hábil. Debemos
recordar que se trata de un inglés clase "Briton",
es decir gentelman, public school, Navy, British empire, rule
Britannia etc (aunque sólo figure en todos estos puntos
como "eccentric", otro concepto típicamente inglés).
Se trata de una categoría de gente que jamás ha
sospechado que pueda no tener toda la razón en todos los
terrenos; tal vez el juez también pertenezca a ese medio,
y es posible además que la posición de Irving le
resulte familiar.
Si AAARGH se interesa mucho por este pleito, es porque este es
el primer proceso de este tipo desde aquél que fuera ganado
por Paul Rassinier contra la
LICA (reconocida culpable de difamación, pero de buena
fe); se trata del primer proceso revisionista en Inglaterra, donde
la cuestión de la difamación, cuando conlleva ataques
que perjudican al interesado en sus recursos vitales así
como a sus familiares, es un tema extremadamente sensible, y además
porque David Irving es un espíritu preciso, conciso, lúcido
y muy osado, no se deja lastrar por blandicies y va al grano sin
rodeos; no le asustan las palabras pues conoce su significado.
Desde su punto de vista, el proceso va a versar sobre tres puntos
principales : el número de víctimas, la orden de
Hitler y el término "holocausto", que descarta
por "and unhelpful. It's too vague, imprecise and unscientific
and should be avoided like the plaga" (" confundidor
e inútil. Demasiado impreciso y anticientífico,
se debería eludir como verdadera plaga" (The
Times, 13 de enero 2000, transcrito en este sitio). Según
Irving, más allá de estos tres puntos, lo que está
en juego es la defensa de la libertad de expresión, como
lo indica el fragmento que hemos colocado a modo de exergo. Esta
es la primera vez, que nosotros sepamos, que el espionaje evidentemente
ilegal y totalmente impune, de naturaleza cuasi terrorista, que
practica el Bnai Brith así como las campañas de
denigración y difamación sistemáticamente
emprendidas contra loas que les caen mal se encuentran denunciadas
por lo que son; por fin se les está pidiendo cuentas a
las organizaciones judías, y pudiera ser que salgan de
ahí mal paradas. No es que nos ilusionemos mucho acerca
de la justicia, pero....
David Irving tiene, desde que este affaire ha comenzado, un sitio
web muy completo, donde se encuentran todos los documentos del
proceso, incluyendo las minutas. El sitio Raeto West comunica
las minutas del proceso (hasta el noveno día en que, sin
que sepamos el por qué, se han interrumpido) así
como sus relatos de los días de audiencia y sus análisis,
sumamente interesantes. Por fin, el sitio Nizkor ofrece un dossier
de prensa más completo que el nuestro. El diario inglés
The Guardian ha abierto, entre sus "reports",
una columna "Irving's libel trial", donde están
mencionados y son acequibles todos los artículos y notas
breves el diario desde el principio del proceso (incluyendo las
notas de audiencia que después no se publican); les recomendamos
esta dirección, la organización es excelente y los
informes son "enough" (leales). En cuanto a nosotros,
ofreceremos durante toda la duración del proceso (se prevén
unos tres meses) los artículos de prensa y los documentos
que nos parezcan interesantes. Y traduciremos al francés
los más elocuentes. Esperamos aparezcan los traductores
al castellano....
Véanse en la sección inglesa los artículos que hemos seleccionado, y en la sección francesa un resumen de los mismos.
Del 26 y 27 de enero, conviene señalar que The Guardian relata cómo Irving sacó su carta de triunfo : no hay agujeros en Auchwitz, lo cual no impide que haya habido exterminio. El historiador oficial Van Pelt, contra -interrogado por Irving, sí dice que hay agujeros. ¿ cuándo llegará el día en que los estudiosos de Auschwitz ya no sean profesores de arquitectura, o de religión, o sicólogos, o farmacéuticos, o profesores de literatura, o ingenieros, sino un equipo de historiadores, arqueólogos, químicos, policías cientifícos, especialistas acostumbrados a preocuparse por las huellas materiales de los hechos, las huellas archivísticas, diplomáticas, narrativas, que confronten sus aportes respectivos, tomando en cuenta los descubrimientos de los demás, cada cual en su especialidad, con un sololo objetivo, el llevar el conocimiento hasta donde se pueda... ? Van Pelt, historiador de arte, que ha sido consejero para la reconstrucción de Auschwitz, ha entregado un informe de cuatrocientas páginas, pero la prensa judía (The jewish journal, 4 february 2000) ya lo dan por derrotado frente a los revisionistas, pues la única conclusión a la que ha llegado es que "resumiendo, ahora es posible tener la certidumbre moral de que Auschwitz era un campo de exterminio donde los alemanes mataron alrededor de un millón de personas con la ayuda de cámaras de gas"
A partir del 7 de febrero, dejan de llegar puntualmente las transcripciones
de lo que se dijo exactamente en el tribunal, sin que se sepa
de dónde procede la operación de frenaje de la información.
En todo caso, a partir de esa misma fecha, empiezan a escasear
los informes en la prensa. A partir del 14 de febrero se vuelven
a interrumpir las transcripciones.
El jueves 17 de febrero hemos recibido un excelente aporte del revisionista portugués Marques, en inglés. Está demostrado que todos van siguiendo el desarrollo del juicio por internet, y esto es nuevo. Agradecemos a Marques el haber subrayado inmediatamente las cobardías torcidas del periodista israelí Segev, que publicó un artículo en Ha'aretz el 4 de febrero.. Marques subraya la falacia de Segev, que admite la afirmación según la cual no hay agujeros en el techo del Krema II (por donde se dice que los SS introducían el Zyklon B), pero simula creer que es un problema de planos. No es capaz de decirles a los israelíes que cualquiera puede comprobar que no existen los agujeros, y que por lo tanto, como lo ha señalado el profesor Faurisson desde hace tiempo, esto invalida todas las versiones del cuento del gaseamiento que se valen de los agujeros, es decir la totalidad de los relatos aportados por ciertos testigos, por el estilo de Urba.
Al margen del proceso, suceden cosas curiosas. Así, el sicólogo Kevin Mac Donald que había venido a testimoniar a petición de la defensa considera insoportables los chantajes típicos sobre el tema del antisemitismo, y envió al e-magazine que arremete contra él un "final" Kevin Mac Donald había aportado su testimonio el 31 de enero 2000, a. Se trata de un profesor de sicología de la universidad de Long Beach (California). Su especialidad es el estudio de los judíos en tanto que grupo (grupo definido por su creencia en ser cada uno de sus integrantes miembro de un pueblo elegido por Dios, que le promete la Tierra si le hace caso). Su prestación disgustó inmediatamente a ciertos habitantes de California. Según The Guardian, Mac Donald defendió la idea de que " no es ningún antisemita, en contra de lo que afirmó la defensa repetidamente. Mac Donald señaló además que la Lipstadt ha escrito a periódicos judíos para condenar con la mayor enregía los casamientos mixtos, entre judíos y no judíos... eso mismo que en otros casos se tacha de racismo...
Al final del "final" indica las razones que lo movieron a testimoniar .... ¡a favor de Irving! : el asco ante la cantidad, la virulencia y la perfidia ideológica de los ataques, especialmente los de la Lipstadt misma.
En el mundillo de los holocausticistas patentados, en Estados
Unidos, cunde cierto vientecillo de pánico. Vuelan los
infundios más crapulosos sobre Irving, que los reproduce
impávidamente en su propia página web. Allí
aparecen aclaraciones interesantes. Así, del señor
David Cesarani, que expresa tristeza ante el "business",
uno descubre que ha sido director de la biblioteca Weiner de Londres,
la cual a su vez es una agencia de propaganda sionista. El director
anterior de la misma era Walter Laqueur, antiguo agente de los
servicios de inteligencia y autor de un libro involuntariamente
revisionista : The terrible Secret, donde se demuestra
que no había ningún secreto en torno a lo que sucedía
en los campos bajo los nazis. El tal Cesarani, pues, publicó
en The Guardian unos comentarios que reflejan pesimismo
acerca del porvenir del complejo mitográfico que se acostumbra
llamar "Shoah". Le Monde tradujo y publicó
el artículo, pero sin aclarar los méritos propagandísticos
que ha hecho Cesarani. De aclararlo, algún desdichado lector
se le podía ocurrir que pudiera existir una especie de
lobby judío con ramificaciones internacionales. Para no
dar paso a semejantes rumores, Le Monde ha decidido no
hablar más del proceso Irving.
Se puede leer la autobiografía de Deborah Lipstadt en versión original aquí mismo, tomada del sitio web del propio David Irving. A continuación, un comentario nuestro en torno a las informaciones que ella misma suministra.
Por las fotos, la acusada de difamación por el historiador David Irving Doña Deborah Lipstadt se parece más a un picapedrero portugués que a una dama del barrio alto. El equipo de sus abogados, en Londres, le prohibió terminantemente que abriera la boca. No hablará a lo largo del juicio, ni siquiera como testigo jurado, y tampoco contestará a la prensa. Es de suponer que su equipo la considera excesivamente bruta para no arriesgar un disparate ante el monumento escénico que resulta ser David Irving, constantemente asediado por una turba de periodistas, a cuanto más israelí cada uno.
El curriculum que ella entregó en el tribunal no deja
de ser fascinante, pues es típico de una categoría
social que no se conoce en Europa.
Nació en 1947 en Nueva York, su padre había emigrado
de Alemania antes del nazismo, posiblemente en busca de la " tierra
prometida " del dólar. La madre es de una familia
judía polaca emigrada a Canada a principios de siglo.
Segón ella, su padre procede de una " eminente "
familia de rabinos, lo cual es una reivindicación frecuente
entre los judíos norteamericanos. Si se tomaran en cuenta
todos los eminentes reivindicados, habría que concluir
que había veinte rabinos por un sastre en cada shtettl.
Su padre fue pues representante y su madre vendía objetos
rituales. Durante el nazismo, el padre intentó en vano
sacar de Alemania a sus cinco hermanas. Al concluir la guerra,
todas estaban con vida, en " otros países "
no precisados , y él consiguió instalar a cuatro
en Estados Unidos. Allí terminan los horrores del holocausto
para dicha familia. Los hijos recibieron una buena educación
judía, en escuelas privadas. Empezó estudios universitarios
en el City College de New York. Se puede suponer que era la primera
vez que se codeaba con gente no judía, pues los padres
estaban metidos en actividades comunitarias con sede en las sinagogas.
Ese es su llamado " hogar tradicional judío ".
Dos años más tarde, se marcha a Israel y se matricula
en la Universidad Hebraica de Jerusalén. Allí la
sorprende la guerra de los Seis Días, en 1967, y decide
quedarse un año más. Atiende clases sobre holocausto
(aunque todavía no se usa el término) e historia
del tercer Reich. La Universidad Hebraica es uno de los centros
donde se elabora la interpretacón de la historia que debe
servir a la refundación de Israel, es decir la transición
progresiva de un sistema nacionalitario, " progresista ",
en ruptura con el mundo de la diáspora, que le dio su energía
al sionismo durante cincuenta años, a una concepción
dolorista, que funda los recursos de Israel sobre la culpabilización
del universo entero, dado como responsable de un acontecimiento
metafísico rebautizado holocausto, del cual Eichman fue
el gran Satanás. De ahí adelante, su " vida
tradicional judía " en Nueva York se vino a sostener
con una " actividad tradicional judía "
en Estados Unidos. De regreso la encontramos inmediatamente matriculada
en la Universidad Brandeis, centro por antonomasia de de la vida
académica judía norteamericana, bien dotada por
millonarios judíos. Y por supuesto la carrera que estudia
es de " estudios judíos ". Ahí
es cuando, dice ella, le empieza a interesar seriamente lo del
holocausto. Dirige una organización de jóvenes judíos
y algo cobra por ahí (lo aclara ella misma). Antes de terminar
el doctorado, la llama la Universidad de Washigton para lanzar
un " programa de estudios judíos ".
Es la época en que muchas universidades se tiraron repentinamente
a los " programas de estudios negros ", y
a modo de contrapeso aparecieron los " programas de
estudios judíos ". Se marcha luego a California.
Desaparece del curriculum la cuestión del doctorado. Parece
ser que nunca aprobó el Ph. D, pero no se dice expresamente.
Irving afirma que él no tiene el menor diploma, ella prefiere
ocultarlo.
Tampoco menciona el libro que publicó sobre " la
prensa americana y el advenimiento del holocausto, 1933-1945,
titulado Beyond belief (Más allá de la creencia "),
publicado en 1986 por Free Press. Es una colección de extractos
de recortes de prensa que pretende demostrar que la prensa sabía
perfectamente lo que ocurría en Alemania, y que la opinión
pública y el gobierno americano fueron culpables con los
judíos. Clásica operación de culpabilización
que alimenta las cajas israelíes. Se reconoce la marca
de la Universidad Hebraica. Es un libro ejemplar en cuanto al
método histórico que preconiza : por una parte,
una investigación para saber qué se dijo, qué
se hizo, en un campo limitado, el de la prensa americana, y por
otra parte, no lo que realmente sucedió en el Tercer Reich,
lo cual también sería un tema histórico,
sino la repetición de la vulgata que circula hoy en día
en los medios universitarios que hablan de eso, es decir esencialmente
judíos americanos (no se estilan los extranjeros). Ningún
trabajo histórico allí, sino un remachar versiones
que se van regando por un " consenso blando ".
Lo mismo practicaba Laqueur, el autor de The Terrible Secret,
antiguo director de la Wiener Library (biblioteca que le acaba
a notificar a Irving que ya no está autorizado a pisar
el lugar) para determinar quién estaba entre los " buenos "
que reforzaron por anticipado la versión actual de los
acontecimientos, y los malos que se habían equivocado y
decían otra cosa que lo se debe decir hoy. El pasado contiene
pues contradicciones --solamente de tipo interno--, mientras la
verdad de hoy no padece de ninguna. La historiografía soviética
llevó a un gran refinamiento esta escolástica.
Después nos encontramos a "Poor old Debbie" en
la universidad Emory en Atlanta, vieja institución adinerada.
Un tal Dorot donó un millón y medio de dólares
para fundar la cátedra de " estudios judíos
modernos y Holocausto ". También ha sido nombrada
en el equipo que preparó la creación del Holocaust
Museum en Washington, negocio que extrajo unos $130.000 al pueblo
norteamericano. Le pidieron que preparara un filme sobre " las
reacciones al Holocausto ". Véase al respecto
nuestro artículo sobre el " shoah business, así
como el del propio Cesarani, actual director de Wiener Library,
" History on trial ". Y en 1994, al año
de ser nombrada en Emory, fue nombrada por decreto presidencial
para formar parte del consejo de administración del museo.
Obsérvese que si, en tanto historiadora, hubiera investigado
por ejemplo el impacto de la Ilustración en los shtettl
de Podolia, jamás se hubiera codeado con la oligarquía.
En el museo atiende el sector educación, es decir el lavado
de cerbro de los cuatro cientos mil colegiales enviados anualmente
al museo, guiados por pastores negros, pues hace falta mostrar
que el museo no se ha hecho solamente para los judíos,
y justificar las enormes subvenciones federales. Para cerrar con
broche de oro, añade nuestra heroína después
de insistir en innumerables reconocimientos oficiales, nacionales
e internacionales, con suma modestia, que ella es " miembro
activo de la comunidad judía norteamericana ",
y que ha sido nombrada por el Departamento de Estado en la comisión
de defensa de la libertad religiosa en el extranjero, dedicándose
principalmente ¡a denunciar los casos de intolerancia por
el ancho mundo, e informar al presidente de Estados Unidos!
De modo que esta pobre mujer en realidad no ha salido de un medio exclusivamente preocupado por la defensa y promoción de una especie de excepción judía en todos los planos, y especialmente el de la exigencia moral y financiera. Este mundillo se mantiene difundiendo el terror entre los judíos normales con cuentos de holocausto, lo mismo que antes se hacía obedecer a los niños de los shtettles con cuentos de aparecidos y dibuk. Hay una credulidad, una imbecilidad judía muy especial que desemboca por lo general en una parálisis intelectual a partir del momento en que se pronuncia la palabra " judío ". Lipstadt es un caso típico del científico falso que reina por este tipo de terrorismo. Sus trabajos " universitaros " son vergonzosos. No sabe ni de historia de Europa ni de Alemania. No lee más que inglés y hebreo. No investiga directamente, sino que toma lo que le conviene de los expedientes de policía política de las grandes agencias judías de espionaje y represión de la libre expresión que son Anti Diffamation League y demás oficinas del B'nai Brith. Se trata de expedientes preparados por estudiantes ignorantes, fáciles de sustituir. El resultado no está a la altura de los millones de dólares que cuestan estas oficinas, condenadas en múltiples ocasiones por tribunales norteamericanos por espionaje y difamación. La Lipstadt, totalmente encerrada en ese mundo delirante dedicado a la " defensa imaginaria " de un " pueblo " igualmente imaginario no es más que la pantalla seudo-universitaria de un vasto sistema de delación, presión y supresión del esptíritu crítico, en Estados Unidos y el mundo. El proceso Irving no revelará los arcanos de estas increíbles asociaciones que tratan de aplastarlo por hacer un escarmiento. El último totalitarismo de nuestro tiempo se encuentra allí. Gane la comisaria Lipstadt o no, todo queda por hacer para desmantelar esta maquinaria loca.
Se nos dice que la defensa de Deborah Lipstadt pidió el texto manuscrito de los apuntes de Eichman. Ahora bien :
1) el mentor de Lipstadt, el historiador Yehuda Bauer, dice que no hay nada interesante allí. Recordemos de qué se trata : Bauer le buscó financiamiento a Lipstadt para la primera versión de su libro (por la fundación Vidal Sassoon, la del champú), especie de anexo de la Universidad Hebraica, y fue el que le aconsejó que recargara sus ataques a Irving. Tamién es él quien actuó como consejero del fiscal general del estado terrorista de Israel, Eliacin Rubinstein, para que autorizara el traslado de las notas de Eichman.
2) El defensor de Lipstadt ha manifestado que ¡no le interesaban esas notas!
3) El juez Gray (audiencia n°29, p. 6) ha dicho : " debo confesar que no estoy seguro de entender en qué el diario de Eichman es relevante, ya que, si no estaba disponible para Irving, y por definición no lo estaba, no veo cómo se le podría oponer tal documento ".
De momento, cualquiera se queda sumido en la perplejidad ya que :
1) ¿Cómo puede la defensa demostrar, con documentos que Irving no posee y que son sumamente difíciles de conseguir (véase a continuación) que el mismo Irving ha ignorado voluntariamente, modificado e incluso falsificado los documentos, para afirmar que Hitler jamás dio la orden de exterminar a los judíos?
2) Rassinier había señalado en septiembre de 1960, en los meses de preparación del proceso Eichmann, que Kubovy había declarado que no existía orden de exterminio por parte de Hitler, y que todas las iniciativas las había tomado el propio Eichmann. Por lo tanto, ¿cómo es posible que el diario de Eichmann, condenado por su responsabilidad aplastante y única en el exterminio de los judíos, sirva para demostrar que Hitler sí dio la orden de matar a los judíos, y que además, si Irving no lo sabe, es porque lo hace a propósito?
Si la defensa de Debbie no solicitó nada de lo de Eichamn,
de lo que se trata es de una operación israelí al
ciento por ciento. Recordemos lo que hay detrás de " los
apuntes de Eichman " : Los israelíes llevan cuarenta
años guardando dicho documento (1200 páginas en
letra gótica cursiva). Lo más propable es que en
realidad Eichman se negaba a considerarse culpable, como lo exigía
la puesta en escena del jucicio según el proyecto israelí.
Lo que sí está disponible en varios volúmenes
publicados en Israel por unos $500 es el texto de las actas del
proceso. También existe una versión en el sitio
web Nizkor, que no trae los documentos, pero sí los debates
y el juicio (texto en inglés; el proceso se desenvolvió
esencialmente en alemán pero los debates fueron traducidos
y publicados simultáneamente, día tras día,
en francés, inglés, alemán). Se sabe que
en los días del proceso, Eichman presionado como pocos,
había esbozado una versión de los hechos al estilo
israelí, facilitada por el hecho de que eran policías
y fiscales judío-alemanes los que mantenían el diálogo
con él. Además, desde los años treinta, Eichman
simpatizaba con el sionismo, y había realizado un viaje
a Palestina. El año pasado, el hijo de Eichmann reclamó
el " diario " de su padre. Los archivistas
empezaron a trabajar para preparar una edición anotada,
el tipo de edición que le dice al lector lo que debe pensar
antes de leer el libro. Pero el resultado no resultaría
satisfactorio, y tanto Ben Gourion como las más altas autoridades
del estado judío dijeron que ese texto era demasiado peligroso,
y no se podía entregar a un proceso editorial normal.
De modo que el proceso Irving ha ofrecido una nueva posibilidad
: soltar el texto a la vez que se le echan unas capas espesas
de rumores que le restan importancia. Así aparecen comentarios
de gente que han leído el documento en Israel. " Nada
extraordinario ", dicen todos, y eso se va regando por
la prensa anglo-sajona y alemana. Nada nuevo, simplemente confirma
lo que ya se sabía. Se rumora que el texto salió
en determinados periódicos (Die Welt, Spiegel), lo cual
no es cierto.
El abogado Rampton dice que no está autorizado a utilizar el texto que tiene fuera de la audiencia, pero no sabe a quién le tiene que pedir permiso. A Irving por fin le entregaron un texto en disquette, lo cual no puede valer de ninguna manera ante la justicia como documento autógrafo...
Todo esto huele a operación de desinformación
de un estilo muy usual en los servicios secretos israelíes.
Todo parece indicar que se trata de un esfuerzo por contrarrestar
los progresos del revisionismo en la opinión pública.
Está saliendo a la luz un supuesto " diario de
Eichman " acompañado por un mensaje diez mil
veces repetido, en los medias más diversos, en distintos
puntos del mundo : Eichman confirma lo que ya se sabía,
de modo que no hace falta leerlo, no vale la pena... ¿después
que se mantuvo oculto el mismo documento durante cuarenta años?
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Vease DEBATE
SOBRE EL HOLOCAUSTO
Cuando la pasión ciega a la Historia
por ERIC
HOBSBAWM. Historiador
La dirección electrónica de este documento es: <http://aaargh-international.org/espa/actualidad/procesoIrving.html>